En 1928 nació una de las mujeres más creadoras y dinámicas de las artes escénicas locales, fundadora del Teatro ICTUS. Delfina Guzmán (María Delfina Guzmán Correa), es una actriz muy reconocida de nuestro país, ha trabajado también como directora de teatro, escritora y como activista política. Ha participado en 21 películas, 26 teleseries y 6 series de televisión.
Delfina viene de una familia acomodada, se educó con Miss Maggie, una institutriz británica y luego en el colegio de monjas españolas franquistas, de donde fue expulsada por indisciplinada.
Con su primer marido Joaquín, vivió un año en Europa y cuando regresó al país, Delfina decide ingresar a estudiar teatro en la Universidad de Chile. Paralelamente, se alejó de la Iglesia, lo que de una u otra forma la llevó a enfrentar a sus padres y la separación de su marido.
Egresó en 1956 de la Escuela de Teatro de la Universidad de Chile. Poco tiempo después ingresó al Partido Comunista atraída por la importancia que asignaban a la cultura y volvió a casarse a fines de los cincuenta, con el dramaturgo y director de teatro Gustavo Meza y se fueron a vivir a Concepción, a una comunidad artística. Delfina perdió el juicio de tuición de sus hijos Joaquín y Nicolás, quienes se quedaron en Santiago con el padre. Se integró -junto a su segundo esposo- al Teatro Universitario de Concepción TUC. En esa ciudad, nacieron los otros dos hijos de la actriz, Juan Cristóbal y Gonzalo. De regreso a la capital, se separó de Gustavo en 1969, y se incorporó a la emblemática compañía Teatro Ictus.
Como parte de ICTUS, Delfina Guzmán actuó en montajes de Victor Jara, Jorge Diaz y Claudio Di Girolamo, entre otros. Participó en la dirección de Renegociación de un préstamo relacionado (1983), Lo que está en el aire (1986), Residencia en las nubes (1987) y Albertina en cinco tiempos (1993).
Otro hito en la vida de la actriz sucedió a principios de los años 1970, cuando se unió a La manivela, programa que revolucionó el modo de hacer humor en la televisión.
En cine, Delfina participó en «Julio comienza en Julio» de Silvio Caiozzi, y en Ángeles, de Tatiana Gaviola. Nunca quiso participar en producciones televisivas, hasta que en 1994 Vicente Sabatini la invito a ser parte de la teleserie “Rompecorazón”, y ella acepto. Desde entonces, ha sido parte de teleseries y se ha destacado en teleseries largos años ininterrumpidamente.
En el 2000 participó en la muestra fotográfica «El actor», donde se desnuda, en el Museo Nacional de Bellas Artes de la capital. En el mismo año, la actriz compró los derechos de la exitosa Copenhague, de Michael Fraym, que ganó el Premio Tony a la «Mejor Obra Dramática».
Con más de 150 obras en el cuerpo, su última aparición en escena la hizo en Aliento, el monólogo que Elisa Zulueta escribió especialmente para ella y que debutó en el GAM a fines de 2019. Bajo la dirección de Álvaro Viguera y reestrenada durante el 2020 en una versión filmada en plena pandemia, allí Guzmán interpretó a Lupe, una mujer de 92 años que escribe en escena una carta dirigida a su hija en la que le pide ayuda para morir y marcharse dignamente.
Delfina Guzmán ha obtenido a lo largo de su carrera más de 13 reconocimientos y distinciones, entre los que se destaca el Premio APES a la Trayectoria 2007, otorgado por la Asociación de Periodistas de Espectáculos. También fue reconocida ese mismo año por el Senado de Chile con el premio a la Trayectoria cinematográfica.
A esta gran mujer no la paró nadie, ni sus padres conservadores, ni sus esposos ni su compromiso con sus hijos. Ha declarado que nunca se sintió postergada como mujer independiente, pues como muchas tuvo que llevar a sus hijos al trabajo y aprenderse diálogos mientras los bañaba o jugaba con ellos.