Ilustración: Marcela "Maliki" Trujillo
Biografía: Samka Durán

Esther Martínez – Las Cuatro Huasas

Cantautora
1903 - 1989

¿Alguna vez se han preguntado cuál habrá sido el primer grupo de música de mujeres en el país? o ¿hace cuánto tiempo se creó? La mujer que posiblemente da respuestas a estas preguntas fue guitarrista, cantante, bailarina, actriz y compositora chilena: una artista completa.
 
Esther Martínez nació en Santiago el 17 de noviembre de 1903. Era considerada una persona estricta y de carácter sereno, cualidades que la llevaron a ser una mujer popular, admirada y prestigiosa en el arte.
 
Comenzó en la música a los doce años, practicando con su guitarra el folclore chileno y las tonadas, los géneros que se dedicaría a desarrollar). Para 1920, Esther ya comenzaba a tener cierta popularidad como cantautora, sin embargo, su mayor tiempo lo dedicaba a la actuación, siendo parte de distintas compañías teatrales. Allí fue donde Esther forjó su oficio artístico, mucho antes de ser identificada por el repertorio folclórico. Llegó a actuar en las obras costumbristas de Antonio Acevedo Hernández, dramaturgo y director nacional popular durante los años veinte en Chile y construyó una trayectoria teatral que, en opinión de Margot Loyola, le valió situarse como la estrella fulgurante del teatro criollo y popular.
 
Sin embargo, la década del treinta le tenía preparado un vuelco en su carrera artística, lo que la situaría como una de las cantoras que más grabaría su voz en discos y una de las músicas más difundidas en las estaciones radiales en Chile. Durante este período fue parte de distintos grupos musicales; pero su agrupación más conocida, que fundó, dirigió y que le significó años de trabajo musical fue el grupo Las Cuatro Huasas.
 
Las Cuatro Huasas es considerado el primer grupo femenino de música de la historia de Chile. Esto no quiere decir que antes no hayan existido otros, pero éste es el primero del que se tiene registro por su popularidad e impacto. En este conjunto participaron otras grandes mujeres como Olga Rodríguez, Raquel Valencia, Yolanda Salas, Teresa Muñoz y la también compositora Sara Parga, hasta que en 1942 el grupo llegó a su fin, luego de grabar una decena de discos que —gracias a la conservación que han hecho sus descendientes— hoy se pueden encontrar en internet.
 
También en los años treinta formó el grupo Los Curicanos y sus canciones fueron recogidas por otras cantoras, como Las Hermanas Acuña, que popularizaron la clásica tonada «En Chillán planté una rosa».
 
Más tarde, Esther siguió indagando en su investigación musical, la cual, si bien estuvo siempre marcada por la música chilena, folclórica y tonadas populares, también se permitió probar, durante los últimos momentos de su carrera, otros estilos populares durante la época como tangos, boleros y chotis.
 
La última vez que se le ve en público fue en 1972, cuando se presentó en una audición llamada “Recorriendo Chile” del canal TVN. De forma especial para dicha ocasión se coordinó el reencuentro de Las Cuatro Huasas, quienes con algunos reemplazos —como la arpista Tita Jordán— lograron mostrarse por televisión, dando a escuchar sus voces y su música folclórica por última vez.
 
Ese mismo año Esther Martínez participó junto a Margot Loyola en la grabación de un álbum de estudio llamado “Canciones del 900”, donde destaca la guitarra de Esther Martínez en la canción “Dolor Minero”, musicalizado por ella misma en los años veinte. Esta balada representa un hito de relevancia histórica, ya que da cuenta de una de las primeras canciones de protesta social que se registran en el haber popular.

Fuente(s): 

Música Popular (Esther Martínez)

Música Popular (Las Cuatro Huasas)

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